21/05/65
Realmente no es “tarde”
___(??) Realmente no es “tarde” en lo que a mí respecta porque nada muere. Como piensa el mundo, cuando no puedes ver a alguien y tocarlo, él se ha ido de este mundo. Así que diremos que el difunto Winston Churchill afirmó que el estado de ánimo decide la suerte de las personas, en lugar de que la fortuna decida el estado de ánimo. Me pregunto si tuvo eso en una visión, si lo tuvo en un sueño. De todos modos, sin duda, para hacer esa audaz declaración lo hizo desde lo más profundo de su alma. ¿Pero es verdad? ¿El estado de ánimo de un hombre decide su suerte y espera que algo bueno suceda en su mundo para obtener ese estado de ánimo de satisfacción? Les digo por experiencia propia que el gran Sir Winston dice la verdad. Podría citarte a ti, no diría a un sinnúmero, pero sí a muchos de los grandes místicos del mundo que llegaron a la misma conclusión. Tomemos como ejemplo a George Russell, mejor conocido como AE: “Me di cuenta de un eco rápido, una respuesta a mi propio estado de ánimo ante unas circunstancias que hasta entonces parecían inmutables en su indiferencia. Por el surgimiento de nuevos estados de ánimo en mí, podría profetizar que pronto conocería personas de cierto carácter; y así los conocí. Incluso los objetos inanimados estaban bajo el dominio de estas afinidades”. Sé por experiencia propia que esto es cierto.
Se nos dice en las Escrituras: “Todo lo que pidáis, orando, creed que lo habéis recibido, y lo recibiréis” (Mc 11,24). También se nos dice que todo el libro llamado Biblia es la palabra de Dios y la palabra de Dios es verdadera. He descubierto que esto es así en mi propia vida, que después de todo es la única que realmente puedo decir que conozco. Y creo firmemente que lo que es verdad para mí es verdad, o debe ser verdad, para cada ser de este mundo. No puedo creer ni por un momento que estoy apartado para experimentar las Escrituras y que tú no experimentarías la misma verdad de la palabra de Dios. Así que esta noche, permítanme compartir con ustedes lo que sé por mi propia experiencia personal y lo que muchos de ustedes aquí han compartido conmigo. Porque te pedí que lo probaras y luego compartas conmigo, si quieres, lo que has descubierto. Bueno, aquí se nos dice en las Escrituras: “Hablaré al hombre en sueños y me mostraré a él en visión” (Números 12:6). Pero todas las premisas determinarán el resultado, ya que todos los fines son fieles a sus orígenes. Si pienso que soy un vagabundo y ese es mi concepto de mí mismo, entonces desarrollaré todo lo relacionado con esa premisa. Si me atrevo a asumir que soy Dios, pues entonces mi visión, mi sueño debería revelar algo fantástico… si me atrevo a asumirlo. Si el mundo te enseña que eres un gusanito—y así es como los sacerdocios del mundo se acercan a las congregaciones del mundo, que eres pecador, que eres esto, eres aquello y lo otro, todo menos Dios— entonces te hacen asumir que simplemente no eres bueno y que has pecado. Cuando has pecado no lo sabes y por qué has pecado no lo sabes, eso no te lo pueden decir; sino que estás cosechando el fruto o los resultados de algún ser antiguo, que podría haber sido un antepasado, y por eso ahora estás confinado a este estado limitado.
