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Espero que podamos hacer de esta la sesión más productiva que hayamos tenido. Si lo aplicas, sé que podemos. Lo que les digo no es especulación; todo se basa en la experiencia. El tema de esta noche es "El hombre de verdad". Si te dijera que el verdadero hombre es tu maravillosa imaginación humana, ¿lo creerías? Si hablo de Imaginación, no piensas en el hombre, piensas en, bueno, una facultad, un poder, algún poder productivo creativo... pero realmente no piensas en el hombre. Pero si alguna vez escuchas la palabra “Jesús”, piensas en el hombre, ¿no? Mil millones de personas en el mundo se llaman cristianos y creen en Jesucristo, y creen en Jesucristo como un hombre… un hombre que es Dios pero hombre. Pero si te dijera que Jesucristo es tu maravillosa imaginación humana, ¿lo creerías? ¿Creerías realmente que la Imaginación es el hombre? Bueno, esta noche espero poder persuadirlos de alguna manera de que Jesucristo es su maravillosa imaginación humana.
No sé si habéis visto el número actual de la Revista Life, es un número doble. Bueno, en él todo el libro está dedicado, este próximo número, a la Biblia. Pero hay un pensamiento que destaca: el de Albert Schweitzer.
Debes haber oído hablar de Albert Schweitzer. Es un gran filósofo, teólogo, musicólogo y doctor en medicina. Hizo un esfuerzo concertado para encontrar al Jesús histórico; luego sacó a relucir sus hallazgos en un libro llamado La búsqueda del Jesús histórico. En el último capítulo, comenzamos con la nota negativa de que Jesús de Nazaret nunca existió… nunca existió, el Jesús de Nazaret. Pero termina el libro con esta nota: “Él viene a nosotros como un desconocido, sin nombre. Él nos ordena: '¡Sígueme!' y a los que le obedezcan, él se revelará”. ¿Y cómo se revela? Se revela, como decía Schweitzer, en un misterio inefable. ¿Cómo? De esta manera: A aquellos que lo seguirán a través de las pruebas, los conflictos, los sufrimientos, como deben pasar por ellos, Él se reveló de esta extraña manera: En su propia experiencia, y entonces sabrán quién es él. Así es como llega al hombre. Él no existía y, sin embargo, llega a uno como alguien desconocido, alguien sin nombre, y sin embargo, en la experiencia personal del hombre se revela a sí mismo de esta manera extraña y peculiar. Y luego tienes la experiencia, sabes quién es.